Pitalito es una población con aproximadamente 120.000 habitantes. Es el segundo municipio más poblado del departamento del Huila según el censo realizado por el DANE en 2005.

La economía del departamento gira en torno a la agricultura, la ganadería, la minería, la explotación forestal, el turismo, los servicios y el comercio. En sus tierras se cultiva arroz, sorgo, yuca, café, caña panelera, cacao, frijol, tomate, granadilla, maíz y frutas en los municipios de Acevedo, Algeciras, Aipe, Campoalegre, Colombia, Garzón, Gigante, La Plata y Pitalito. Podemos agregar que según el ministerio de Agricultura nacional en Pitalito se cosecha el mejor café especial del mundo.[cita requerida] Pitalito se convirtió en el principal productor de café en Colombia y pionero en café especial de alta calidad.

La ganadería es de doble propósito, de leche y de carne, y se desarrolla principalmente en los municipios de Aipe, Altamira, Algeciras, Campoalegre, Hobo, Gigante, Garzón, Timaná y San Agustín. Se explotan minas de carbón, oro, plata y cobre en Aipe, Algeciras, Altamira, Baraya, Palermo y San Agustín. La explotación forestal se realiza en Colombia, Guadalupe, Pitalito y San Agustín.

El comercio y los servicios se concentran en la capital. El principal centro turístico de la región es el Parque Arqueológico de San Agustín.

El arribo de importantes empresas a la ciudad de Pitalito, también hace parte de un importante desarrollo económico. Almacenes de carácter nacional e internacional.

La Secretaría de Desarrollo Económico y Agropecuario ha retomado el estudio juicioso realizado por los estudiantes de la escuela normal dirigidos por reconocidos estudiosos de la cultura, para realizar recorridos turísticos por áreas desconocidas por muchos donde se encuentran el arte de los petroglifos ubicados en las veredas Anserma, Guamal, Charguayaco y Guacallo, igualmente rescatar la belleza y la mitología de los recursos naturales con los que contamos, tales como la Laguna de Guaitipan y que decir del paisaje sobre el río Yuma donde la naturaleza habla por si sola